domingo, 11 de octubre de 2009

¡VIVA GUAYAQUIL!

Estuve en Guayaquil prácticamente toda este semana y la verdad que el ambiente festivo era enorme. Aquí un pequeño homenaje a esta bella ciudad, ya volveré para contarles cómo la pasé por allá.



SAL PRIETA

Hace unas semanas estuve en Manabí, específicamente en Manta y Portoviejo, de hecho regreso a esta bella provincia ecuatoriana tras muchos años de ausencia.
Estas ciudades han cambiado mucho, se nota el progreso que han tenido y su gente sigue siendo amable como siempre o mucho más.
La comida sigue siendo espectacular en donde quiera que uno quiera degustar los sabrosos platillos del mar. De hecho en Manta fui invitado a la cevichería "El Gato", cuya sede pirncipal está en Portoviejo. Había escuchado mucho de este lugar pero nunca tuve la oportunidad de comer ahí hasta ahora y la verdad la espera valió la pena. El plato que deleite no recuerdo el nombre pero era una sopa, tipo cazuela, con todos los mariscos imaginables, con un sabor manaba inconfundible.
Pero lo que más me llamó la atención, nuevamente tras largos años de no visitar Manabí, fue que en toda mesa manaba no puede faltar la famosa Sal Prieta.
Maní, maiz, pimiento, ajo, cilantro, achiote , orégano, comino y sal son los ingredientes de este producto. Se lo come con plátano, maduro o también arroz y se constituye en el producto que pone el sello de sabor en los platos manabitas.
El pimiento, ajo y cilantro se unen al maní y al maíz. La porción tiene una coloración pálida hasta la combinación con el achiote.
La mezcla adopta un color rojo naranja. Luego vienen los granos y los vegetales.
El perfumado aroma del orégano le da un ‘toque mágico’. Las porciones de sal llegan al último.
Dos y tres amasadas a toda la mezcla y la sal prieta queda lista.
En cada comida que degustaba ahí estaba presente la tradicional sal prieta que la comí con maduro principalmente y en gran cantidad que en mucho tiempo no podré olvidarme de ella ni de la bella Manabi.